Prólogo a Reforma o Revolución, de Rosa Luxemburgo

         Rosa Luxemburgo fue una de las figuras más importantes en la historia del movimiento obrero internacional. Junto con Lenin y Trotsky era la representante más destacada del marxismo en el siglo XX. “Reforma o Revolución” fue uno de sus primeros escritos más importantes. Escrito en 1899, proporciona una demolición devastadora de la base teórica y práctica del reformismo. Era completamente válido en el momento en que fue escrito y continua siendo totalmente válido en la actualidad.

Alan Woods y Niklas Albin Svensson   

www.marxist.com   -  03 de octubre 2014

         Parece asombroso, pero ella sólo tenía 28 años cuando lo escribió. Y se situó entre los principales líderes de la izquierda de la socialdemocracia internacional, un papel que iba a ocupar hasta su asesinato en 1918. Hoy continua siendo uno de los textos clásicos del marxismo.

La socialdemocracia alemana

          Para comprender la importancia de este trabajo es necesario explicar la evolución de la socialdemocracia alemana (como era conocido el movimiento socialista, internacionalmente, antes de 1914). El Partido Socialdemócrata alemán fue con diferencia el partido más grande y más influyente de la Segunda Internacional (Socialista).  Era considerado el modelo de Partido en la Internacional. Había logrado superar con éxito el período represivo de la década de 1880 (el período de las leyes anti-socialistas) y en 1898 se había convertido en el Partido más popular en Alemania.

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          Además, gracias a sus vínculos históricos con Marx y Engels, el SPD, fue considerado como el representante más auténtico del marxismo "ortodoxo" en la Internacional. Sus líderes disfrutaron de una enorme autoridad a los ojos de los socialistas en todas partes. El curso del desarrollo del Partido Socialdemócrata alemán, por tanto, ejerce una enorme influencia en el desarrollo del conjunto de la Segunda Internacional y los Socialdemócratas de todo el mundo prestaban mucha atención al desarrollo del Partido y de los debates en su interior. Esto incluyó los Socialdemócratas rusos que levantaban la vista hacia el Partido Alemán.

          Sobre el papel, todo parecía que estaba en orden. En la prensa del Partido y en los discursos sobre el Primero de Mayo, los líderes alemanes hablaban en términos solemnes sobre el socialismo, la lucha de clases y el internacionalismo. Y si ellos se apartaban de la línea del socialismo y el internacionalismo revolucionario, Karl Kautsky, el líder "oficial" del ala de izquierdas del SPD alemán, estaba seguro de corregirlos. Hasta 1914 Lenin se consideraba a sí mismo como un "kautskista" ortodoxa. Sólo en 1914 pudo Lenin comprender el verdadero papel de Kautsky, como una cubierta de "izquierdas" para la derecha la burocracia reformista del SPD.

         Sin embargo, detrás de este impresionante fachada no todo era lo que parecía. Desde el principio Marx y Engels hicieron una serie de duras críticas de las tendencias oportunistas de los líderes de la socialdemocracia alemana, su debilidad ideológica, su tendencia a sacrificar los principios de ganancias a corto plazo "prácticos" y su tendencia a hacer concesiones. La Crítica del Programa de Gotha es el ejemplo más conocido de la actitud crítica de los fundadores del socialismo científico, pero en la correspondencia de Marx y Engels encontramos las críticas mucho más nítidas.

         En Alemania, la rápida industrialización de la segunda mitad del siglo XIX había creado una clase obrera militante fresca, sin la carga de las tradiciones del anarquismo o el sindicalismo Inglés. La crisis económica de la década de 1870 dio un gran impulso al Partido Socialdemócrata. Bismarck trató de bloquear su avance a través de las leyes anti-socialistas en 1878, que prohibió el Partido. Pero el Partido prosperó en existencia semi-legal. Después expiraron las leyes anti socialistas en enero 1890 (y Bismarck se vio obligado a dimitir), ganó 20% del voto popular en las elecciones de febrero.

          Sin embargo, el periodo de ilegalidad y semi-ilegalidad no pasó sin dejar algunas huellas negativas. Un sector de la dirección, especialmente los intelectuales y académicos, a quienes Engels despectivamente tilda como "Katheder Sozialisten" (socialistas de sofá) utiliza las restricciones causadas por las leyes de diluir programa socialista del Partido y ocultar sus objetivos por motivos de conveniencia. Desde Londres, el anciano Engels criticó a estos oportunistas sin cesar y puso presión sobre Bebel y Kautsky para mantener al Partido en el camino correcto.

          Estas diferencias siguieron siendo desconocida, o mal entendidas por los miembros del SPD, y eso era aún más cierto para la inmensa mayoría de los socialistas a nivel internacional. Es por eso que la traición de los dirigentes socialdemócratas alemanes en 1914 asestó un golpe tan demoledor a la moral del movimiento socialista internacional. El propio Lenin fue tomado por sorpresa, como Trotsky explicó en un artículo sobre el papel de Rosa Luxemburgo:

          "La capitulación de la socialdemocracia alemana el 4 de agosto de 1914, fue totalmente inesperado por Lenin. Es bien sabido que la cuestión de los Vorwärts con la declaración patriótica de la facción socialdemócrata fue tomada por Lenin para ser una falsificación por el Estado Mayor alemán. Sólo después de que él estaba absolutamente convencido de la horrible verdad hizo que sujeta a revisión de su evaluación de las tendencias básicas de la socialdemocracia alemana, y al mismo tiempo hacerlo, realiza esta tarea de la manera leninista, es decir, él terminó una vez por todas."  (Trotsky, Manos Fuera de Rosa Luxemburgo)

         Rosa Luxemburgo comprendió el papel de Kautsky mucho antes de Lenin, un hecho que reconoció en octubre de 1914, cuando escribió a Shlyapnikov:

        "Odio y desprecio a Kautsky ahora más que nadie, por su vil, sucia, por su hipocresía de autosatisfacción ... Rosa Luxemburgo tenía razón cuando escribió, hace mucho tiempo, que Kautsky tiene el 'servilismo de un teórico' - servilismo, en el más claro lenguaje, el servilismo a la mayoría del partido, al oportunismo "

          Ilusiones previas de Lenin en Kautsky se pueden explicar por el hecho de que durante la mayor parte del tiempo estaba siguiendo el partido alemán desde la distancia. La razón por la Rosa fue capaz de ver a través de Kautsky y los otros dirigentes del SPD (incluidos los "izquierdistas"), era por que ella había tenido experiencia directa de sus actividades desde hacia mucho tiempo y podía ver con más claridad que Lenin lo que su "marxismo" significaba en la práctica.

Degeneración Reformista

          La tragedia de la Internacional Socialista fue que se formó en una época en que el capitalismo en Europa fue en el curso de un colosal ascenso. La expansión económica de este período que precedió a la Primera Guerra Mundial es en última instancia, la explicación de la degeneración nacional-reformista del SPD y de toda la II Internacional. Trajo consigo una mejora de la suerte de un sector de las masas en Alemania, Gran Bretaña Francia y Bélgica, incluyendo concesiones y reformas, y el consiguiente ablandamiento de las relaciones entre las clases. Se condicionó la psicología de la capa dirigente de los partidos de la socialdemocracia y dio lugar a la ilusión de que el capitalismo estaba en camino de solucionar sus contradicciones fundamentales. Fue la premisa social y económica para el surgimiento del Bernsteinite revisionismo.

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        El rápido crecimiento en el poder y la influencia de los partidos obreros y los sindicatos también dio lugar a una nueva casta de dirigentes sindicales, parlamentarios, concejales y los burócratas del partido que, en sus condiciones de vida y perspectivas, fue descontextualizada progresivamente de las personas que se supone que representan. Este estrato, razonablemente acomodada y arrullado por el aparente éxito del capitalismo, siempre es la base social para el revisionismo, una reacción pequeño burguesa contra la tormenta y la tensión de la lucha de clases, un anhelo de comodidades y el deseo de una solución pacífica y transición armoniosa al socialismo, en un futuro oscuro y lejano.

         El Partido Socialdemócrata alemán surgió de la ilegalidad con unos 100-150.000 miembros y creció de manera constante a lo largo de la década de 1890, tanto en militancia y en votos. El rápido crecimiento del Partido también trajo nuevos problemas en forma de aumento de las presiones de la sociedad burguesa. Aunque a nivel nacional, fueron excluidos de toda participación del gobierno, a nivel estatal, sobre todo en el Sur, el Partido fue invitado a apoyar a los liberales en el gobierno. Este fue un intento deliberado para obtener el SPD para asumir la responsabilidad de la gestión de la sociedad capitalista, para incorporar al partido en el régimen después de la represión había fracasado.

         En 1905 el SPD tenía 385.000 miembros y 27% de los votos. La prensa del Partido tenido un público masivo, con 90 periódicos y revistas con una circulación de 1,4 millones en 1913, el Partido y su prensa tenía alrededor de 3.500 trabajadores a tiempo completo, a los que hay que añadir más de 3.000 dirigentes sindicales. Todas las organizaciones tienen un lado conservador. Esto es particularmente cierto del aparato. El alma del aparato es de rutina: la organización de reuniones, recaudar fondos, vendiendo periódicos, administrar las finanzas, la contabilidad y las mil y una pequeñas tareas que son absolutamente necesarias, pero que pueden conducir a hábitos de rutina. Lo mismo puede decirse de la labor sindical. Esto consiste en gran medida de una serie de tareas rutinarias. El crecimiento del movimiento obrero en Alemania, Francia, Gran Bretaña y Bélgica dio lugar inevitablemente a poderosos aparatos burocráticos que mediante su capa superior reflejaban las presiones del capitalismo.

        Las tendencias oportunistas de los dirigentes obreros aumentaron continuamente en los años anteriores a 1914 La burocracia reformista de los sindicatos SPD y comerciales no estaba interesada en la teoría, sino sólo en la "política práctica". Los líderes del Partido cayeron bajo la influencia de la idea del gradualismo, la idea de que poco a poco, gradualmente, pacíficamente, el capitalismo podría ser reformado sin la necesidad dolorosa de una revolución socialista: hoy sería mejor que ayer, mañana será mejor que hoy, hasta que finalmente un día nos levantábamos por la mañana para encontrarnos viviendo en el paraíso socialista. Esta ilusión reconfortante, tan relajante para el sistema nervioso, finalmente fue quemada por las nubes de la Primera Guerra Mundial.

El revisionismo de Bernstein

        El revisionismo surgió por primera vez como una tendencia a "criticar" las ideas de Marx y Engels, o más bien para "ponerlas al día". Eduard Bernstein se convirtió en el teórico de la tendencia revisionista, que tiene una sorprendente similitud con el llamado "Socialismo del Siglo XXI”, pregonada por Heinz Dietrich y otros hoy en día. Estas personas siempre dicen tener algo que decir completamente nuevo y original, pero nunca lo hacen. Los defensores del "Socialismo del siglo XXI” no dicen nada que no encontramos expresado mucho mejor por Bernstein y los socialistas utópicos.

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        Marx explicó que “el ser social determina la conciencia”. No es un accidente que la tendencia revisionista en Alemania se hizo más fuerte en medio del boom de la década de 1890. Durante la crisis de 1873-1882 la economía había crecido apenas un 3% en el transcurso de una década. El período de 1887 a 1896, en comparación tuvo un crecimiento del 36%. El boom estaba sembrando ilusiones en el capitalismo. Una serie de pequeñas reformas y concesiones en el frente industrial también dio la impresión de que a través de un fortalecimiento gradual de las organizaciones de la clase obrera, una mejora gradual de las condiciones de la clase obrera podría lograrse.

         Bernstein lanzó su asalto contra la "ortodoxia" en una serie de artículos publicados en la revista teórica del partido, Die Neue Zeit entre 1896 y 1897. Aunque estos artículos causaron indignación entre el ala izquierda del partido, no hubo respuesta seria y Kautsky del " Izquierda ", que editó Neue Zeit, incluso agradeció Bernstein por su" contribución "al debate. Como resultado, el ala derecha se envalentonó y una tendencia revisionista se organizo en torno a la revista Sozialistische Monatshefte (publicado por primera vez en enero de 1897).

         Al igual que todos los revisionistas de la historia, Bernstein comenzó su intento de "llevar el marxismo hasta la fecha", para "liberar" el marxismo de Hegel (es decir, de la dialéctica). Pero es imposible atacar un aspecto del marxismo sin atacar o distorsionando todos los demás. Al final, Bernstein rechazó todos los pilares fundamentales del marxismo, no sólo a la dialéctica, también la teoría del valor-trabajo, la teoría de la crisis, la revolución socialista, etc. Su objetivo era demostrar que las contradicciones entre las clases estaban disminuyendo, que la clase media estaba creciendo y que el crecimiento del capitalismo no tiene límites: las crisis del capitalismo podrían ocurrir de nuevo, pero no necesariamente a peor.

           Entre otras cosas, Bernstein sostuvo que la concentración de la producción industrial estaba teniendo lugar a un ritmo mucho más lento de lo previsto por Marx; el gran número de pequeñas empresas mostró la vitalidad de la empresa privada ("lo pequeño es hermoso", como se dice hoy en día!); en lugar de la polarización entre trabajadores y capitalistas, la presencia de numerosos estratos intermedios significa que la sociedad es mucho más compleja ("las nuevas clases medias"); en lugar de "la anarquía de la producción", el capitalismo era capaz de ser controlado en la medida en que las crisis eran menos frecuentes y menos graves (el keynesianismo y el "capitalismo dirigido"); y la clase trabajadora, además de ser una minoría de la sociedad era sólo interesado en la mejora inmediata de sus condiciones materiales de existencia.

         Las teorías supuestamente "modernas" de la actual líderes laborales son sólo plagios torpes de nociones mucho más hábilmente expresadas por Bernstein hace cien años. Según él, el único objetivo del partido iba a ser la lucha por las reformas, una posición que se resume en su célebre (y esencialmente sin sentido) la frase: "El objetivo, sea lo que sea, no es nada para mí, el movimiento es todo". Respondiendo a Bernstein, Rosa Luxemburgo explicó que sus teorías, si eran aceptadas por el Partido, inevitablemente llevará a una ruptura completa con el marxismo:

          "Si las corrientes oportunistas en la actividad práctica de nuestro Partido son un fenómeno completamente natural, que se puede explicar a la luz de las condiciones especiales de nuestra actividad y de su desarrollo, la teoría de Bernstein es un intento no menos natural para agrupar estas corrientes en un general expresión teórica, un intento de elaborar sus propias condiciones teóricas y la ruptura con el socialismo científico."

El oportunismo de Kautsky

          La respuesta de la dirección del Partido para el ataque era tímida, cobarde y evasivo. A pesar de que no hayan podido acordar necesariamente con Bernstein, que eran reacios a involucrarse en una batalla sobre la teoría de que, si la verdad es que se les diga, que consideraban como una irrelevancia inútil, como el hada del árbol de Navidad. Habrían preferido todo el tema que se vaya. Karl Kautsky no dijo nada por un largo tiempo. De hecho, él fue el que publicó los artículos en el primer lugar. August Bebel, el líder del partido, fue igualmente discreto.

          Kautsky era considerado generalmente como el guardián de la ortodoxia marxista por excelencia y el principal teórico del partido, "el Papa del marxismo". Pero el marxismo de Kautsky tenía un carácter abstracto, escolástico. Mientras, Plejánov considero a Bernstein como a un enemigo que debía ser combatido, desenmascarado y, si es necesario, expulsado, Kautsky todavía lo veía como un compañero errante, cuyas excentricidades teórica no debe echar a perder una relación amistosa agradablemente. La actitud de Kautsky se revela claramente en una carta que escribió a Axelrod en el 09 de marzo 1898, felicitándolo por sus artículos contra Bernstein en los siguientes términos:

           "Estoy muy interesado en su opinión de Eddie. De hecho, me temo que lo estamos perdiendo ... Sin embargo, todavía no lo he de darlo por un mal trabajo y espero que cuando entre en-si personal sólo contacto por escrito con nosotros, entonces algo del viejo luchador hará regresar a nuestro Hamlet (sic), y él volverá a dirigir su crítica contra el enemigo y no contra nosotros".

         Un montón de respuestas aparecieron en el escritorio de Kautsky, pero él se negó a publicarlas, afirmando que todo fue un "malentendido". Esta fue también la línea adoptada por Vorwärts, el papel principal del Partido. Pero tanto Franz Mehring como Parvus escribieron artículos muy críticos contra Bernstein en los papeles que controlaban. A nivel internacional, Plejanov escribió un artículo titulado "¿Por qué debemos darle las gracias?", donde no solo somete a Bernstein a una crítica muy aguda, sino que también ataco Kautsky por no haberle refutado.

        En el congreso del partido, las cosas llegaron a un punto, a pesar del intento por parte de los funcionarios del partido para mantenerlo fuera de la agenda. Hubo un enfrentamiento abierto entre los revisionistas y los izquierdistas en la que Rosa Luxemburgo tuvo un papel destacado. En la sesión que fue dedicado a la prensa del Partido, Klara Zetkin atacó Kautsky y Vorwärts por su silencio sobre Bernstein.

         La intensificación del conflicto obligó al centro, ocupado por Bebel y Kautsky, a intervenir. Bebel proclamó que "es totalmente falso tácticas para robar al Partido su entusiasmo y su voluntad de hacer sacrificios empujando sus metas en el futuro indefinido". Pero incluso en responder Bernstein, estas palabras Bebel revelaron su filisteísmo y la debilidad teórica. En realidad, fue oponerse a Bernstein, no tanto por estar equivocado en lo que dijo, pero para decir cosas que él sentía podría socavar la moral del Partido.

          Ignaz Auer, en privado, reprendió a Bernstein, aconsejándole que "uno no dice esas cosas; uno simplemente las hace ". Esta observación sintetiza admirablemente la estrecha ignorancia y falta de principios de los dirigentes del SPD. Se opusieron a Bernstein, no por lo que dijo o escribió, sino por el debate que plantea una amenaza para la unidad del Partido. "¿Por qué causar tantas molestias? No hay necesidad de proporcionar una justificación teórica de nuestro oportunismo. No hay necesidad siquiera de hablar de ello. Just do it! "Y eso fue exactamente lo que los dirigentes del SPD estaban haciendo.

         La dirección del Partido estaban esperando para enterrar el problema. Ellos trataron de suprimir la discusión, y, en particular, las llamadas a tomar medidas contra los revisionistas ignorados. En completo contraste, Rosa Luxemburgo atacó el ala oportunista del Partido por su hostilidad a la teoría:

          "Lo que parece caracterizar a esta práctica por encima de todo? Una cierta hostilidad hacia la "teoría". Esto es muy natural, para nuestra "teoría", es decir, los principios del socialismo científico, imponer limitaciones claramente marcados para la actividad práctica".

Lenin hizo el mismo punto cuando atacó a los seguidores rusos de Bernstein, la denominada tendencia Economista en ¿Qué hacer?:  "Sin teoría revolucionaria no puede haber movimiento revolucionario. Esta idea no puede insistirse demasiado fuerte en una época en la predicación de moda del oportunismo va de la mano con un entusiasmo por las formas más estrechas de la actividad práctica ".

Reforma o revolución

          En el verano de 1898, Rosa Luxemburgo prepara su respuesta, que apareció en la Leipziger Volkszeitung en el otoño (antes del congreso del partido Stuttgart).Para Rosa Luxemburgo no se trataba sólo de una cuestión de derrotar a Bernstein en una votación (que sucedió una y otra vez en los congresos del partido), sino de educar al-rasos del Partido:

          "Es, por lo tanto, en interés de la masa proletaria de la Parte para su conocimiento, de forma activa y en forma detallada, con los conocimientos actuales de la teoría sigue siendo el privilegio de un puñado de 'académicos' en el partido, este último se enfrentarán el peligro de extraviarse. Sólo cuando la gran masa de los trabajadores tomar las armas penetrantes y confiables del socialismo científico en sus propias manos, tendrán todas las inclinaciones de la pequeña burguesía, todas las corrientes oportunistas, a la nada.”

        En Reforma o revolución Rosa Luxemburgo proporcionó una respuesta política global a Bernstein. A diferencia de otros críticos de los críticos de Bernstein, Luxemburgo no fue meramente el objetivo de defender el statu quo. Al atacar el reformismo de Bernstein fue un reto implícitamente la práctica reformista existente de los dirigentes del SPD. Ella fue a trabajar incansablemente hasta su asesinato, para defender el marxismo revolucionario y para educar a la base en la teoría revolucionaria.

        Hoy, casi un siglo después de su asesinato, el nombre de Rosa Luxemburg es una fuente de inspiración para los socialistas en todas partes. Junto con Lenin, Trotsky, Karl Liebknecht y Connolly, defendió la causa de la revolución socialista y el internacionalismo proletario y murió luchando por ella. Es cierto que a veces cometía errores, pero incluso sus errores fueron siempre motivada por consideraciones revolucionarias. Después de su muerte, Lenin, que admiraba mucho a Rosa Luxemburgo, la defendió contra sus críticos "marxistas" citando un viejo proverbio ruso:

          "A pesar de que las águilas no abatirse, por debajo de los pollos vuelan, los pollos con alas desplegadas nunca se alcanzaran las nubes en el cielo."

Aquellos que deseen exagerar las diferencias entre Rosa Luxemburgo y Lenin a menudo citan sus críticas a los bolcheviques en 1918, cuando ella estaba escribiendo desde una celda de prisión en Alemania. Privada de información precisa sobre la situación en Rusia, su valoración era unilateral y básicamente incorrecta. Sin embargo, incluso entonces, esta es la forma en que habla de la insurrección de octubre:

         "Todo lo que una parte podría ofrecer de coraje, visión de futuro revolucionario, y la consistencia en una hora histórica, Lenin, Trotsky y los otros compañeros han dado en buena medida. Todo el honor revolucionario y la capacidad de que la socialdemocracia de Occidente carecía estuvieron representados por los bolcheviques. Su insurrección de Octubre no fue sólo la salvación real de la revolución rusa; fue también la salvación del honor del socialismo internacional.”

         Hoy en día las ideas de Reforma o Revolución’ son tan correctas y relevantes como el día en que fueron escritas, y la joven generación de luchadores de clase en México y a nivel internacional buscan inspiración en esa gran revolucionaria, luchadora y mártir de la clase obrera, Rosa Luxemburgo. En las palabras del gran revolucionario León Trotsky:

        “La crisis de la dirección proletaria no se supera, por supuesto, mediante una fórmula abstracta. Se trata de un proceso en extremo monótono. Pero no de un proceso puramente “histórico”, es decir, de las premisas objetivas de la actividad consciente, sino de una cadena ininterrumpida de medidas ideológicas, políticas y organizativas con el propósito de unir a los mejores elementos, los más conscientes, del proletariado mundial bajo una bandera inmaculada, elementos cuyo número y confianza en sí mismos deben fortalecerse constantemente, cuya ligazón a sectores más amplios del proletariado debe desarrollarse y profundizarse, en una palabra: devolverle al proletariado, bajo condiciones nuevas y altamente difíciles y onerosas, su dirección histórica. Los confusionistas del espontaneísmo tienen tanto derecho a referirse a Rosa como los miserables burócratas de la Comintern a Lenin. Dejemos de lado los incidentes superados y, con toda justificación, podremos colocar nuestro trabajo por la IV Internacional223 bajo el signo de las “tres L”: no sólo bajo el signo de Lenin, sino también de Luxemburgo y Liebknech”.   - (Luxemburgo y la Cuarta Internacional)

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