¡ ISRAEL, MANOS FUERA DE RAFAH, DE GAZA !
¡Luchemos contra el imperialismo y los gobiernos de la burguesía en nuestros países!
Por: Salvador Pérez
Las imágenes son dantescas, con miles de
palestinos huyendo de forma desesperada de Rafah, evacuando no solamente esta
ciudad de Gaza, sino también Khan Younis.
Por ahora, sin embargo, estas operaciones sionistas están teniendo un
carácter “limitado”, pero todo indica que podríamos estar ante la perspectiva a
corto plazo de una invasión total por parte de las fuerzas de las FDI. Este pasado martes una brigada de tanques
sionistas se apoderaron en Gaza de la zona de cruce con Egipto.
Ate toda esta situación, tras meses de
preparación de este ataque en contra de Rafah, la pregunta que debemos
responder es ¿A qué se debe el retraso?
Netanyahu en
la cuerda floja
Todo indica que el genocida Netanyahu está
en serios problemas, tanto internos como externos. Él está ahora
permanentemente equilibrando cuáles son sus propios objetivos y necesidades.
Netanyahu tiene que estar tranquilizando a sus propios socios de gobierno de la
extrema derecha, pero al mismo tiempo esta obligado a tranquilizar también a su
socio mayor del imperialismo norteamericano, a Joe Biden, cuya Administración
comienza a quemarse los dedos fruto de las cada vez más importantes
movilizaciones en los propios EE.UU. en contra del genocidio al pueblo
palestino.
Sin lugar a dudas que estos nuevos planes
sionistas de abordar ya un ataque sobre Rafah va a significar un aumento masivo
del número de muertos entre los civiles indefensos de Gaza y ello supondrá un
brutal aumento de las presiones de las masas árabes sobre sus gobiernos, sobre
todo comenzando por los regímenes en Egipto y en Jordania, que entraran en
crisis y en una enorme inestabilidad.
La Administración Biden es consciente de
que esto también va a provocar una creciente radicalización en la ya muy
radicalizada juventud en los Estados Unidos. Los marxistas no perdemos de vista
que ya la nueva generación de jóvenes norteamericanos, que están dando un
colosal ejemplo con sus protestas, con la creación de campamentos de Costa a Costa,
mostrando el camino de la lucha a cientos de miles de jóvenes en todo el mundo.
Ya
en estos momentos solo un ciego es incapaz de ver que los propios EEUU están
sumergidos en una profundísima división, reflejo de una amplia división en
términos de clase. Los trabajadores norteamericanos se mueven decisivamente
hacia la lucha y la sindicalización y, ante todo la juventud está radicalizándose
en una clara oposición a la guerra genocida librada por Israel, con el apoyo y
la bendición de la Administración Biden.
Es absolutamente lógico que los
trabajadores y los jóvenes norteamericanos se pregunten cada vez con más fuerza
¿por qué hay dinero para la guerra, los genocidios y las destrucciones en todo
el mundo, pero siempre nos dicen desde el gobierno que no hay dinero para empleos,
servicios sociales e infraestructuras decentes que necesitamos?; ¿el por qué la "ley y el orden" se
aplica siempre con la policía para silenciarnos cuando nos manifestamos,
utilizando gases lacrimógenos, porras,… pero nunca en contra de los amigos y
aliados de Estados Unidos, aunque estos estén cometiendo atroces crímenes de
guerra?
Estamos viendo, reflejo de la profunda
división de clases en la sociedad norteamericana a la juventud en el lado de
las barricadas, defendiendo al pueblo palestino, justo en los momentos en los
que la clase dominante estadounidense respalda, alienta y promueve la atroz guerra
de Netanyahu. No existe ningún barómetro inventado para saber en que punto
concreto se la lucha de clases se producirá una explosión revolucionaria. Pero
los marxistas si hacemos un seguimiento de los acontecimientos que se van
produciendo y ellos nos indican que en los propios EEUU la sociedad ha entrado
en un nuevo periodo histórico, en donde la crisis económica del capitalismo por
un lado y las atrocidades de barbarie que son capaces de cometer la burguesía
imperialista por el otro, están conduciendo hacia un punto de ebullición
social, que inevitablemente acabara en un proceso revolucionario, también en
los propios EEUU
La valiente y ejemplar lucha de la
juventud norteamericana, apoyando firmemente la causa del pueblo palestino en
Gaza en contra de su propio gobierno está teniendo un importante eco de apoyo
entre sectores cada vez mas numerosos e importantes de la clase trabajadora. Es
sintomático de esto que el importante sindicato UAW, el cual organiza a los
trabajadores de los Campus Universitarios en Estados Unidos, ha mostrado su
plena solidaridad con la lucha de los jóvenes y se han comprometido ya a
realizar acciones de protestas y luchas.
La juventud en muchas ocasiones ha jugado
en la historia el papel de barómetro social, anticipando con su lucha procesos
mucho mas profundos en la sociedad, que han permitido acto seguido el
desarrollo de luchas importantes de la clase trabajadora. La lucha actual de
los jóvenes de los Estados Unidos son una anticipación de procesos mucho mas
importantes de lucha de la potente clase obrera norteamericana. Y ello tiene
aterrorizado ya a los sectores mas inteligentes de la clase dominante y a la
propia Administración de Biden.
Netanyahu
comienza a dividir a los imperialistas
Netanyahu se ha movido hasta ahora
considerando una sola y exclusiva cuestión: COMENZAR Y CONTINUAR LOS
ATAQUES, MANTENIENDO A SU LADO EL APOYO IMPLICITO O EXPLICITO DE LOS ESTADOS
UNIDOS. Es esto lo que explica realmente la cuestión en el retraso de su
campaña de ataque a Rafah, que hasta ahora se habían visto frenadas en parte
por las presiones de sus aliados los imperialistas.
Qué duda cabe que toda la situación
interna en los EEUU dificulta los planes del imperialismo para continuar
apoyando abiertamente al gobierno de Netanyahu, al punto de que están
apareciendo las primeras grietas en las relaciones entre ambos gobiernos. Netanyahu
y su gobierno intentaban e intenta evitar entrar en conflicto con quien es su
principal patrocinador, los EEUU. Pero hace tan solo unos días han declarado públicamente
que “están muy descontentos con la forma en que los negociadores
estadounidenses han llevado a cabo las conversaciones con Hamás”. Por su parte,
desde el gobierno de los Estados Unidos han respondido que “que Netanyahu y el
gabinete de guerra no parecen que estén abordando con buena fe las últimas
negociaciones".
Con plena influencia en la campaña
electoral y en medio de crecientes movilizaciones sociales, Biden ha repetido
en varias ocasiones que su Administración "no apoyará una operación
militar importante, sin un plan efectivo, para asegurarse de que los civiles
no sufran daños" [énfasis nuestro]. Pero estas declaraciones del
anciano Biden son de tal calibre de estupidez, como pedirle manzanas a un árbol
de aguacates. Tales garantías no pueden ni existirán, son imposibles en el
marco de unos ataques a una ciudad que es densamente poblada, llena de mujeres,
ancianos, niños y hombres indefensos.
Un reciente artículo del periódico norteamericano
“Financial Times” decía textualmente:
"La decisión [de comenzar el ataque
contra Rafah] marca una de las mayores apuestas de la larga carrera de
Netanyahu. Detener los combates para liberar a los rehenes dejaría a Hamas
exultante, y a muchos de sus líderes, incluido Yahya Sinwar, en libertad.
Rechazar el acuerdo para avanzar más en Rafah supondría el riesgo de una
ruptura fundamental con Estados Unidos y dejaría incierto el destino de los
rehenes.
"Ha hecho que el destino de los 132 rehenes que
aún están en poder de Hamas sea uno de los dilemas más espinosos del mandato de
Netanyahu, uno en el que su carrera política y la seguridad de Israel están
inextricablemente entrelazadas".
Claro está, que en términos de política interna en los
Estados Unidos también es una clara demostración de miedo de la clase dominante
ante los primeros conatos de movilizaciones de la juventud y los trabajadores
en contra de esta criminal guerra.
Netanyahu
en cuestión
Aún en estos momentos existe una clara mayoría
en Israel que apoya el ataque de las FDI en contra de Gaza. Pero sin embargo esos
apoyos se reducen bastante, a casi una división en dos, Un 56% de los israelís
opina que en estos momentos debería de darse prioridad a un acuerdo sobre liberación
de los rehenes, antes que afrontar una ofensiva militar en contra de Rafah.
Los líderes de Hamas están tratando de
presionar y explotar la cuestión de los rehenes y ello está teniendo efectos
claros de dividir a la población dentro de Israel, posicionándola en contra de
los planes de Netanyahu.
Netanyahu y sus amigos de la extrema
derecha en el gobierno israelí en realidad no han mostrado nunca ningún tipo de
preocupación por la suerte de los rehenes. En especial la extrema derecha está
viendo y defendiendo una perspectiva que lleve adelante la continuidad de la
guerra, de que el ejército sionista ocupe el conjunto de Palestina, tomando
Israel posesión de todo el territorio histórico de Palestina y creando un Gran
Israel, más determinante aún en toda la situación en la zona territorial. Con
la política de Netanyahu de permitir la expansión en la practica de estos
planes de la extrema derecha, en realidad lo que esta haciendo es desafiar
abiertamente las demandas de sus apoyos entre los imperialistas, que como decíamos
ven con temor que toda la situación en Oriente Medio acabe en una tremenda
EXPLOSION SOCIAL.
RAFAH Y
LAS PERSPECTIVAS DEL HORROR
Las perspectivas para la invasión total de
Rafah son catastróficas y son esas perspectivas las que están infundiendo de
miedo a los imperialistas, que temen que todo el conflicto salte por los aires.
Diversos informes procedentes de Israel afirman que el gobierno sionista ha
encargado 40.000 tiendas de campaña, al objeto de crear “dos zonas humanitarias,
que podrían albergar a unas 400.000 personas·. Son cifras de verdadero horror,
pero que no contemplan ni de lejos la verdadera situación.
En Rafah hay al menos 1,5 millones de
personas, amontonadas en la ciudad y en sus alrededores. ¿Dónde irán a parar
más de 1,1 millones de personas, no contempladas en los planes de acoger en las
“dos zonas humanitarias en tiendas de campaña por el gobierno israelí?, porque,
además, Israel tiene en sus manos el control fronterizo con Egipto, la única vía
de “escape que existe”, en teoría.
A toda esta situación debemos añadir que
hasta ahora Rafah era también la principal vía de entrada de los camiones de
ayuda humanitaria al conjunto de Gaza. Una vez que Israel había cortado todos
los demás puntos fronterizos para que esa ayuda llegue a Gaza, ahora con el
ataque a Rafah dejara a toda la población palestina de Gaza sin ninguna
posibilidad de recibir ningún tipo de ayuda humanitaria, a merced de la
hambruna total. Israel con sus ataques militares y sin permitir la llegada de
esas ayudas, lograra exterminar por la vía de las bombas, metrallas y hambre al
conjunto de la población palestina en Gaza.
El portavoz
de la Autoridad de Cruce Fronterizo de
Gaza, Hisham Edwan, ha realizado la siguiente declaración: " Con el ataque
a Rafah Israel ha condenado a muerte a los residentes de la Franja [de Gaza].
Esta sentencia de muerte ya se está ejecutando, desde el comienzo de los
bombardeos hasta la creciente amenaza de hambruna. 1,1 millones de personas, la
mitad de la población de Gaza antes de la guerra, viven en la inseguridad
alimentaria catastrófica".
El avance israelí
sobre Rafah está previsto se lleve por etapas. Los funcionarios de las FDI han
dado la orden de evacuación solo para el Este de la ciudad. Pero estos mismos funcionarios
ya han declarado que prevén perseguir a los seis batallones de combatientes de
Hamas que se esconden en el sur, norte, oeste y este de Rafah. Sus pretensiones
son destruirlos y ello implica un ataque sistemático de un barrio a otro, en un
asalto total a Rafah. Y esto, según decía Biden, era lo que su Administración
estaba tratando de evitar.
HAMAS
BUSCA EL ACUERDO
Hasta minutos antes de
los inicios de las operaciones militares de Israel sobre Gaza los dirigentes de
Hamas estaban anunciando a los cuatro vientos de que estaban “dispuestos a
negociar, que aceptaban una tregua en tres fases, dividida en seis semanas y
que ello implicaba la liberación gradual de los rehenes”. Pero desde el
principio se encontraron con el problema de fondo de toda la situación, los
puntos de diferencias que siempre han existido en todos los intentos de “negociación
en los que han participado”.
Los lideres de Hamas han perseguido
siempre “garantías sólidas de Estados Unidos y las otras potencias, en el
sentido de que dicha tregua debía de conducir a un alto el fuego permanente”. Pero
el gobierno reaccionario de Netanyahu continúa insistiendo en que “solo consideraría
un alto el fuego temporal al objeto de poder recuperar los rehenes israelíes,
pero que reanudaran la guerra hasta lograr su objetivo central, destruir
totalmente a Hamas”.
Pero toda la realidad desmiente las pretensiones
de los dirigentes de Hamas. En primer lugar, porque todas las actuaciones de Netanyahu
están condicionadas por sus propias consideraciones de carácter interno. El es
plenamente consciente de que solo puede mantenerse en el poder manteniendo
unido a su gobierno de coalición reaccionario si se opone a cualquier compromiso
con Hamas. Si fuera aceptado la propuesta de alto el fuego es bastante probable
que su gobierno hubiera saltado por los aires, en una situación en la que esta
estaba muy cuestionada por el ascenso de la lucha de clases en el propio Israel.
Los propios sionistas extremistas habían ya
planteado dentro del gobierno de coalición que procederían a derribar al
gobierno de Netanyahu si aceptaba un alto el fuego. Y ello que duda cabe
significaba el punto y final político de Netanyahu, que además esta expuesto a
procesos judiciales en curso por casos de corrupción. Netanyahu estaba antes
del inicio de la guerra en una situación totalmente cogido por débiles alfileres:
su futuro político en entredicho y amenazado con acabar entre rejas. Es claro
que todo ello son motivos de peso para que hiciera declaraciones desafiantes al
imperialismo norteamericano de que “Israel iría sola y atacaría con todo a
Rafah, incluso si su país debía quedar aislado internacionalmente”.
Desde el comienzo de la guerra contra Gaza
las FDI han reducido a escombros todo
lo que había en Gaza, desde las viviendas, las escuelas, los suministros de
agua, gas, hospitales y todo tipo de infraestructuras. Todo ello nos lleva a
pensar que pese a las constantes declaraciones de Netanyahu el autentico motivo
no era destruir totalmente a Hamas.
Antes del inicio de
las acciones en contra de Rafh el número de víctimas causadas por el ejército
israelí no baja de la cifra de las 35.000.
Una vez que los ataques a Rafah han comenzado, no es creíble pensar que
las cifras no se tripliquen, como mínimo, a menos que dichos planes sean
detenidos y ello es algo que solo podrá lograrlo el creciente movimiento de movilización
y lucha de las masas en todo el mundo, comenzando por la juventud.
Las FDI ya han dicho
que “cualquier persona que se acerque a las vallas fronterizas este y sur, cualquiera
que permanezca dentro de la zona de evacuación designada, estará en peligro”. Ello
no significa otra cosa que todo habitante, todo trabajador en estas zonas, son
considerados objetivos militares por los sionistas.
LAS MASAS TIENEN LA PALABRA EN SU LUCHA
Los Estados Unidos están
posicionándose en el epicentro de la oposición a la masacre de los palestinos en
Gaza, lo cual es de suma importancia política, ya que la lucha está partiendo
del pleno corazón del imperialismo. Particularmente está siendo valiente el movimiento
estudiantil en esta lucha, en donde ayer mismo las autoridades de La Florida
gasearon a los acampados, en un contexto general de aumento brutal de la
represión del Estado burgués norteamericano, en unidad de acción con fuerzas de
extrema derecha reaccionarias del sionismo en los EEUU, en contra de las
protestas. La situación en Gaza esta sirviendo como un autentico catalizador en
el proceso creciente de radicalización y giro hacia la izquierda de las masas,
de la juventud y la clase obrera a nivel mundial.
Es de suma importancia
que el movimiento de protesta estudiantil y juvenil que comenzó en la
Universidad de Columbia (Nueva York) se haya extendido rápidamente por todo los
Estados Unidos, haya traspasado sus fronteras hacia Canadá y como un auténtico
rayo eléctrico se esté trasladando cruzando el Atlántico hacia toda Europa, a
Austria, Suiza, Francia, Reino Unido, Estado español e incluso hacia Australia
y Japón. En estos momentos el movimiento de lucha en los EEUU comienza a
extenderse desde las Universidades hacia los Centros de Enseñanzas Medias, al
igual que en el Estado español, lo que augura un crecimiento numero
espectacular en las próximas fechas.
Para todos los escépticos
del mundo mundial, esto es una clara señal del verdadero significado que tendrá
en este próximo periodo el proceso de la revolución socialista, que transformará
la sociedad de un país a otro como un verdadero proceso mundial.
No menos
significativos están siendo ver cómo, a pesar de las políticas criminales de
sus gobiernos “árabes”, los jóvenes y los estudiantes también están comenzando
a moverse en línea a la lucha en apoyo y solidaridad con el pueblo palestino,
por todo Oriente Medio y África del Norte, desde Beirut, a Kuwait, a El Cairo,…
luchas que señalan el comportamiento hipócrita de sus gobiernos que con la boca
pequeña dicen “apoyar a los palestinos”, mientras en la practica no han tomado
ninguna decisión en contra del sionismo israelí.
DESPRECIO
POR LAS INSTITUCIONES DEL IMPERIALISMO
Hasta ahora estamos
viendo una gran escuela de aprendizaje para las masas en las actuaciones de las
instituciones del imperialismo mundial. Las resoluciones de la ONU y las
decisiones de la Corte Internacional de Justicia no tienen ningún efecto sobre
las acciones de Israel y en el mejor de los casos son simples gestos
publicitarios.
Se está extendiendo
una clara comprensión entre los sectores más conscientes de la juventud de esta
evidencia empírica sobre las instituciones imperialistas burguesas, jóvenes que
entienden que sus gobiernos en medio de los bombardeos y el horror sobre Gaza
en el mejor de los casos “expresan condenas morales, al objeto de calmar
consciencias, pero que sus clases dominantes continúan haciendo sus lucrativos
negocios, aprovechando la guerra. Los jóvenes y los trabajadores, en un hecho
muy positivo de cara al futuro también, comienzan a juzgar a sus burguesías y a
los organismos del imperialismo, no por lo que dicen, sino por lo que en
realidad hacen.
Y cada vez es más evidente
para miles, decenas de miles de jóvenes y trabajadores en todo el mundo que la
clase dominante mundial es la que ha estado detrás del respaldo total a la gran
maquinaria de guerra de Netanyahu, apoyándolo financieramente y con todo el
armamento que ha necesitado. Nadie puede dudar de que detrás de esto esta una
de las razones principales del porque el movimiento de protesta y lucha ha
comenzado y es tan importante en los propios Estados Unidos, luchas que en el
fondo son una lucha en contra de la propia Administración de Biden y de la
clase capitalista en su conjunto, los amos del Imperio mundial.
El movimiento de lucha
va por muy buen camino. Los estudiantes norteamericanos están exigiendo
conocer, que Biden haga públicas las conexiones económicas y financieras entre
las Universidades y las empresas de EEUU y las de Israel. Es un excelente punto
de partida, para exigir que sean cortadas de raíz todas esas conexiones, con el
objetivo de que se ponga punto y final a la brutal guerra de exterminio en
contra del pueblo palestino.
EL
MOVIMIENTO SE DEBE FORTALECER
En un proceso claro de
avance del nivel de conciencia, los jóvenes han comenzado a comprender que no
pueden esperar nada positivo de las acciones de sus propios gobiernos. Que solo
y tan solo las acciones de lucha y movilización desde debajo de la juventud y
la clase trabajadora serán capaces de frenar y parar los planes reaccionarios
de guerra del sionismo. Es por eso que ya han comenzado a participar activamente
en las marchas, manifestaciones y protestas que hoy en día ya recorre casi todo
el mundo, que necesitamos potenciar y extender en estos próximos días ante el
recrudecimiento de las acciones Rafah.
La clase dominante
israelí está procediendo despiadadamente en defensa de sus propios intereses. Y
esas acciones reaccionarias no podrán ser paradas solamente con las acciones y
luchas limitadas al movimiento estudiantil, por muy importante que podamos
llegar a hacer que sean. En primer lugar, necesitamos dotar al movimiento de
lucha de un claro programa y a un plan de lucha que logre poder intensificarlo:
esa es la tarea ahora número uno de los marxistas en todos los países.
Debemos lograr
vincular al movimiento de lucha de los estudiantes universitarios con los
trabajadores académicos y no académico de las propias universidades. Hay que lograr
vincular la lucha de los estudiantes universitarios con los estudiantes de
secundaria y también como una tarea central con los jóvenes trabajadores en
todos los países. Hay que lograr levantar un masivo movimiento de lucha de la
juventud en todo el mundo que envíen un serio mensaje a Netanyahu y a la clase
dominante estadounidense:
¡¡ La juventud nos
levantamos contra vuestra guerra, contra vuestros gobiernos, contra vuestro Sistema!!
Marx explico que “hasta
ahora los filósofos se han limitado a interpretar el mundo, ahora de lo que se
trata es de transformarlo”. Los marxistas siempre hemos explicado que
analizamos la historia no simplemente por interés intelectual, sino para
extraer de ella las experiencias necesarias para las batallas del futuro, para
prepararnos para dirigir con éxito los procesos de luchas y revoluciones que
tendremos ante nosotros y estar en posibilidad de ofrecer una dirección a la
altura de las necesidades para cambiar la sociedad.
La radicalización
estudiantil de la década de 1960 culminó con el histórico movimiento de mayo de
1968. Estos acontecimientos nos mostraron el enorme potencial de lucha del
movimiento juvenil y estudiantil, llegado a ciertas proporciones, sobre todo si
este movimiento es capaz de extenderse hacia la clase trabajadora en su
conjunto.
Incluido el mayo de
1968 la extensión hacia la clase obrera de la lucha fue clave y la huelga
general de más de 10 millones de obreros, que tomaron las fabricas en Francia
fue la clave para poner en cuestión la suerte y futuro del propio Sistema
capitalista, que en un momento determinado la propia burguesía francesa e
internacional dio por muerto en Francia. Unos acontecimientos similares se
vivieron en México, Pakistán, Italia y en algunos otros países durante los años
1968.69.
Y lo más importante en
estos momentos, un proceso similar e incluso superior no puede, ni debemos
descartarlo en la situación existente hoy en día, en la época histórica de “agonía
prolongada a muerte del Sistema capitalista mundial”. La juventud y la clase
obrera internacional tiene la palabra en ultima instancia y las tareas de los
marxistas es prepararnos para ofrecer una dirección correcta, dotada de ideas,
programa, perspectivas y métodos correctos para conducir estos procesos hacia
la victoria.
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