CRISIS SINDICATOS ESPAÑOLES REFLEJA BANCARROTA DIRIGENTES PRO – ‘PACTOS SOCIALES’

-  Toxo afirma afiliados a CCOO han bajado.

-  'Una parte de la sociedad nos ve como un problema', afirma Toxo.

-  Necesitamos Sindicatos Combativos, de Lucha, para Defender  Intereses de Clase de los Trabajadores/as.

 

Salvador PEREZ

             En anteriores artículos en este Blog nos hemos preguntado donde están metidos, más bien diríamos escondidos, los dirigentes de CCOO y UGT, en especial sus Secretarios Generales, Toxo y Méndez. Pues bien, acabamos de recibir noticias de Holanda, perdón, queríamos decir de Torremolinos (Málaga), en donde se está celebrando el IV Congreso Agroalimentario de CCOO. En este Congreso ha intervenido Toxo y ha revelado algunos de los efectos que está teniendo entre los trabajadores la aptitud de los dirigentes del sindicato, con él como máximo responsable.

             En medio de un contexto económico y social de profunda crisis estructural del capitalismo, en donde los sectores que encuentran un cauce para la lucha están movilizándose activamente, en donde hoy como nunca los trabajadores están necesitados de una fuerte organización y dirección para la lucha por no caer más en el pozo de la barbarie capitalista, en este contexto paradójicamente Toxo ha confirmado que “CCOO "ha bajado el número de afiliados, que también sufrimos la erosión de las circunstancias en las que nos encontramos".

           El S. General de CCOO afirmo igualmente dos cosas importantes que nos ayuda a comprender el lastimoso papel objetivo que están jugando las direcciones sindicales, el cual lejos de permitir un fortalecimiento de nuestras organizaciones sindicales, las está debilitando. Insistimos, objetivamente necesitamos mas que una de unas fuertes organizaciones y direcciones sindicales, y políticas (lo cual debería estar preocupando en estos momentos igualmente en Izquierda Unida), para dar la batalla a fondo a las políticas de la clase dominante y el gobierno reaccionario del PP.

CRISIS POLITICA SINDICAL DEL PACTO SOCIAL

             De esta forma Toxo reconoció en el Congreso de la Federación del sindicato que "haríamos mal en pensar que todo lo que nos sucede depende de factores externos. Debemos mejorar en cuestión de imagen, porque no es como nos vemos nosotros sino cómo nos ve la sociedad y una parte de la misma nos ve como el problema". "Tenemos que ser una referencia para todos esos jóvenes, inmigrantes, mujeres que no ven en el sindicato una solución a sus problemas. Cuando más lo necesitan no ven en nosotros la referencia primera. Tenemos que mejorar sensiblemente".

             Esto simple y llanamente es un claro reconocimiento, pero sin extraer las consecuencias ultimas de ello, por parte de Toxo, de que la política sindical mantenida por la dirección es incorrecta objetivamente, que no sirve a la clase trabajadora para luchar contra la embestida del capitalismo y que por ello la clase trabajadora tiene una percepción negativa de CCOO, de su dirección. Por ello se hace necesario un cambio a fondo, de la política sindical y de los dirigentes, al objeto de convertir a CCOO (y a UGT) en instrumentos validos al movimiento obrero en estos momentos.

… Y CRISIS FINANCIERA DE LOS SINDICATOS

           Por esta idea nos pareció, erróneamente, una aproximación a la realidad por parte de Toxo, cuando este afirmo que "ser sindicalista no es un modo de vida, Estamos de prestado, representando a la gente. Y tenemos que transmitir la sensación que gestionamos de forma adecuada, ordenada, con independencia y que el sindicato vive fundamentalmente de sus afiliados"… "Hemos generado unas superestructuras en la fase de bonanza económica, que no se pueden mantener, por razones de eficacia. Por ello hay que adelgazar la estructura política del sindicato. Es básico para el próximo periodo. Exige actuaciones inaplazables"…

           "Tenemos que buscar la independencia financiera. La Constitución Española asigna a las organizaciones sindicales una atribución que va mucho más allá de la empresa y que ha de ser retribuida desde lo público. Controlada por los presupuesto del Estado y vigilada con Auditorio Interna y Externa. Cada euro que llega tiene que ser para lo que ha sido destinado".

           Con todo ello Toxo viene a reconocer que pese a la política que están defendiendo de ‘instar al pacto, al acuerdo, social con el gobierno y los empresarios’, toda la cual les venia magníficamente bien a la burocracia sindical en las décadas anteriores, que se vieron recompensadas por la clase capitalista con decenas de millones para sus gordas y anquilosadas estructuras burocráticas, ahora el defender esa política sindical solo ayuda y facilita a la clase dominante a imponer sus ataques contra la mayoría de la sociedad, que comienza a ver en los dirigentes sindicales a gente incapaces de defender a los necesitados, al tiempo y junto a ello que la clase capitalista también ‘recorta’ los fondos económicos para los sindicatos, que han permitido vivir muy bien a los burócratas, e intentan ahogarlos económicamente. Evidentemente, a pesar de sus dirigentes actuales, no se fían de los sindicatos, que pueden ser transformados por los trabajadores en herramientas de lucha, así que mejor ‘anularlos’. 

LEVANTAR UNA ALTERNATIVA DE CLASE

         Dialécticamente es por ello que la política sindical que están llevando a cabo los dirigentes de CCOO y UGT es contraproducente para los trabajadores, inútil para defender las condiciones de vida dignas y reaccionarias en los objetivos por tanto que logra. Cambiar esta política sindical es una necesidad de primer orden y los actuales dirigentes, con Toxo y Méndez al frente, no pueden ser los abanderados de una nueva. Barrer hacia el cubo de lo inservible las políticas de ‘pactos sociales’ significa al mismo tiempo barrer a los actuales dirigentes y sustituirlos por verdaderos luchadores de clase, de revolucionarios que no tengan miedo a enfrentarse a la clase dominante.

         La crisis económica del capitalismo inevitablemente tiene su reflejo en el conjunto de la sociedad, transformándose en crisis social, cultural y política de todo lo ‘viejo’, de todo aquello que se limita a intentar mantener en pie al capitalismo agonizante.

           Los dirigentes llamados ‘reformistas’ son simplemente usados como ‘muletas’ para que se apoye la clase dominante en sus ataques al conjunto de la población y en la medida en que no defienden una política intransigente de lucha para los trabajadores, estas direcciones reformistas entran en crisis y convulsionan. Estamos ante momentos en donde veremos grandes sacudidas y cambios en los sindicatos de clase y las organizaciones políticas de izquierdas, en donde durante décadas han dominado cómodamente las ideas y programas de la socialdemocracia, de los adaptados al sistema.

          No tenemos la menor duda de que una política correcta, de clase, en el seno de CCOO y UGT, en estos momentos estaría creando la sensación ‘no de ser un problema’, sino de ser vistos los sindicatos de clase como una necesidad objetiva para la lucha y a ellos estarían acudiendo miles y miles de trabajadores a organizarse bajo un correcto programa de lucha, el cual inevitable y objetivamente conduce a la lucha por la transformación socialista de la sociedad, lo único que representa una alternativa frente a la creciente barbarie de un sistema capitalismo que agoniza históricamente.