CRISIS UCRANIANA Y PERSPECTIVAS

· El Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo plantea claramente que conflicto Ucrania puede afectar seriamente a la economía global

· Este no será un periodo de tranquilidad y armonía bajo el capitalismo. Sera todo lo contrario, una etapa marcada por constantes crisis económicas, sociales, políticas,…

Salvador PEREZ

         “Bajo un escenario menos favorable, en especial si incluyera la imposición de sanciones financieras, Rusia entraría en recesión y el crecimiento medio de la región se vería pulverizado hasta el frenazo total entre 2014 y 2015”… “En ese punto, la crisis de Rusia y Ucrania empezaría a afectar a la economía global”, afirman no sin un nerviosismo creciente desde el Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo –BERD- La situación en Ucrania esta reventando, explotando textualmente, en todos sus frentes y la mayor parte de las ocasiones en dirección opuesta a los planes imperialistas. Aún así, los estrategas burgueses ‘esperan’ buenas noticias.

        En principio estos estrategas esperaban, tan cómicamente como Mariano Rajoy lo hace en el Estado español, que 2014 fuera el año de la recuperación económica en los países del Este europeo, tras la profunda recesión en la que viven, claramente visible desde al menos 2011. Ahora las intrigas y maniobras reaccionarias de los imperialistas en Ucrania ha provocado ya una crisis a todos los niveles, que ha llevado estas ‘esperanzas’ directamente al cubo de la basura teórica de la burguesía.

       El BERD mismo acaba de revisar, siempre están revisando a la baja, sus previsiones para el conjunto de la región, recortando las previsiones desde el 2,7% que ‘esperaban’ de crecimiento hasta un miserable 1,4%, que por supuesto tampoco será real. Y todo ello siempre ‘confiando’ en que la crisis política y social en Ucrania y Rusia no se desarrolle más en términos bélicos. Pero como siempre hemos explicado, “la guerra no es otra cosa que la política llevada a cabo por otros medios”.

       Algunos estrategas burgueses sienten un frio helado cuando recuerdan el caso, nada lejano en el tiempo, de la quiebra financiera en Rusia en 1998. La crisis financiera comenzó el año anterior en Asia, se profundizo con el posterior colapso de los precios de las materias primas y continuo desarrollándose en medio de una profunda crisis cambiaria en Rusia, llevando al país a la quiebra, que se sumo además al panorama internacional de inicios de la crisis. Todo un mundo de pesadilla para las masas y de absoluta incapacidad de la burguesa internacional para prever nada y menos para solucionar ni un solo problema.

RUSIA, LA CLAVE DE LA SITUACION

        En todo el panorama en los países del Este, una zona especialmente delicada desde siempre para los imperialistas, Rusia continua siendo el ‘país clave’ de la situación. Por ello la situación económica que subyace detrás de la crisis actual en Ucrania no puede dar muchas ‘alas a la esperanza’. Los analistas mas serios saben que este trimestre Rusia entrara nuevamente en recesión, en un agravamiento de su crisis económica y social. Y el pequeño gran problema que ellos ven y no tienen forma de solucionar es que el resto de economías de los otros países son absolutamente dependientes de la economía rusa, por distintos motivos. Así por ejemplo, en el consumo de Gas en la región, el 50% del total consumido en Moldavia, Lituania, Letonia, Eslovaquia, Armenia y Hungría, además de la misma Ucrania, es el gas ruso.

         Las remesas procedentes desde Rusia son fundamentales y decisivas para la propia financiación de países enteros de esta zona, como pueden ser los casos para Kirguistán, Tayikistán y Uzbekistán. Otros países de la zona tienen igualmente una dependencia de las relaciones con Rusia por otras vías, mediante fuertes vínculos comerciales y de inversión: estaríamos hablando de países como Eslovenia, Croacia, Serbia, Bulgaria y Montenegro.

       En publico los imperialistas y sus estrategas intentan aparentar fortaleza y firmeza en su política respecto al asunto ucraniano. Pero en realidad están tirándose de los pelos, en una situación que les llena de pánico, porque saben que toda la situación derivara en consecuencias económicas para el resto del planeta. La interrelación y dependencia de los proceso a nivel mundial son determinantes en esta época histórica y los estrategas de la clase dominante son conscientes de ello, al igual que del propio papel reaccionario que la burguesía juega ya para el desarrollo de la humanidad.

       Ellos hablan de forma ligera de ‘sanciones a Rusia’, pero tiemblan de los efectos de ello ante las repercusiones en toda la región. Saben que el empeoramiento en la situación económica rusa es clave para el resto de la zona. Ellos ven la situación económica y social, observan e influyen reaccionariamente sobre la situación en Ucrania y con todo ello se horrorizan pensando en el próximo periodo. Los aires y huracanes de procesos revolucionarios congelan la mente de la burguesía, cuando además observan que el deterioro económico en Rusia es imparable, al igual que lo es también en Turquía.

        Y todo ello representa una amenaza firme y concreta sobre los planes de recuperación económica para la zona euro y para los propios EEUU, que tras retirar una parte importante de las llamadas ‘políticas de estímulos’, la economía no despega y se ve amenazada de nuevo a la recesión y la crisis. Y por ultimo, que duda cabe que todo ello tendrán un impacto directo en las economías de los llamados ‘países emergentes’, absolutamente dependientes del contexto económico mundial.

       Los estrategas del BERD, por boca de su economista jefe, andan con todo ello nerviosos y plantean directamente, ‘cuando piensan que nadie los ve’ que “lo que realmente nos preocupa más es la potencial escalada de las sanciones contra Rusia, particularmente sobre el sistema financiero”. Y por supuesto que la parasita clase burguesa rusa no esta dispuesta a invertir, a ‘contribuir’ en la propia economía rusa, ni en ningún otro lugar. Ellos están acostumbrados al saqueo y al robo sistemático y su deporte favorito continua siendo la evasión de capitales.

        Las cifras de salida de capitales observada en Rusia en el primer trimestre ha hecho ‘saltar las alarmas’ de los estrategas económicos a nivel internacional. En el BERD elevan las ‘estimaciones’ de salida de fondos desde Rusia en mas de 64.000 millones de dólares, tan solo entre enero y marzo, muy superior a las cifras anuales que se vieron en los años 2012 y 2013. Ellos dicen, como si descubrieran en este siglo XXI la pólvora, que “a diferencia de años anteriores, la salida de capital estuvo impulsada por un menor endeudamiento más que por un aumento masivo de la inversión rusa en el exterior”.

        Y como siempre desde la caída del muro de Belén, los ‘caritativos’ inversores internacionales no están por la labor de hacer ‘prestamos de dinero’, ni de nada, a Rusia en las actuales circunstancias. El Ministerio de Finanzas de Rusia ha tenido que cancelar tres subastas de emisión de Deuda, por la falta de demanda’. Esta bajando peligrosamente, de nuevo las inversiones en la industria y en la economía rusa, por la falta de liquidez financiera de unas empresas que se endeudaron en el primer trimestre en tan solo 9.000 millones de dólares, ante las cifras anteriores de mas de 36.000 millones el año anterior, ante lo que denominan cínicamente desde el BERD como “una menor actividad inversora y un acceso mucho más difícil a la financiación externa”. Esto lo dice todo ante las perspectivas económicas para Rusia, por consiguiente para toda la zona.

         Los estrategas financieros del imperialismo saben que cualquier dato ‘positivo’ de hoy acaba convertido en su contrario en pocas fechas. Una buena lección de ello lo han vivido en el caso de Turquía, que ahora mismo esta viviendo socialmente las consecuencias del terrible caso de la muerte de los mineros de Soma, asesinados por un autentico ‘terrorismo patronal y de Estado’.

         El informe del BERD sobre la situación económica en Turquía señala que “pese a la incertidumbre política y los vaivenes en el sentimiento de los mercados del pasado verano, la economía turca creció el 4% en 2013, algo más de lo previsto”. Sin embargo, esos ‘buenos augurios económicos’ se vinieron abajo rápidamente en el primer trimestre, en el que la Lira perdió mas de un 10% de su valor y los costes financieros se dispararon rápidamente. El crecimiento económico para Turquía es previsto ya que sea inferior al 2,5% y aun prenden enormes incógnitas sobre ello, ya que dicen en el BERD que “el mayor riesgo para Turquía es que la retirada de estímulos por la Reserva Federal afecte al flujo de capitales hacia los mercados emergentes más de lo previsto”.

        Toda la región es un potencial polvorín, que amenaza con hacer saltar de nuevo hacia el abismo a la economía europea y mundial, en su conjunto. Si la burguesía esperaba contar con un auge económico en Europa, centrado en el crecimiento de la eurozona, esto esta cada vez mas cuestionado por la realidad concreta. La economía Alemana creció mezquinamente y ello ha pesar de volcar enormes sacrificios sobre la clase obrera y la mayoría de la sociedad, cuyos frutos veremos en este próximo periodo. Y los países de sur de Europa no levantan, ni lo harán en décadas, cabeza en este laberinto de pesadilla económica en la que entro el capitalismo.

       Los países periféricos de Europa Central, el Báltico, del sureste, del Este, Cáucaso y Asia Central (Croacia, Estonia, Hungría, Letonia, Lituania, Polonia, Eslovaquia, Eslovenia, Albania, Bosnia-Herzegovina, Bulgaria, Macedonia, Kosovo, Montenegro, Rumania, Serbia, Armenia, Azerbaiyán, Bielorrusia, Georgia, Moldavia, Ucrania, Kazajistán, Kirguistán, Mongolia, Tayikistán, Turkmenistán y Uzbekistán), en parte se beneficiaron del comercio con la eurozona, especialmente a traes de Alemania, pero este parece que ser aun camino cada vez mas cerrado para ellos, debido a la propia crisis económica y financiera que vive la eurozona.

       Sin duda hablamos de una zona del mundo en donde veremos desarrollarse de forma virulenta y brusca la lucha de clases en el próximo periodo, después de que la burguesía mundial sea absolutamente incapaz de cumplirles a la población de estos países las promesas de años atrás de ‘bonanza y prosperidad capitalista’.

      El FMI el mes pasado presento un Informe sobre la región en el que hacia algunas consideraciones significativas del estado de animo de la burguesía mundial ante el próximo periodo y futuro: “en la región sobrevuela una inusual constelación de riesgos: la potencial escalada de las tensiones geopolíticas en el área; nuevos episodios de volatilidad financiera derivados del proceso de normalización monetaria en las economías avanzadas y un prolongado crecimiento débil en la zona euro”.

       Los acontecimientos, que continúan desarrollándose, en Ucrania constituyen en ultima instancia un reflejo significativo del nuevo periodo en el que hemos entrado a escala mundial. Este no será un periodo de tranquilidad y armonía bajo el capitalismo. Por el contrario, será una época marcada por constantes crisis económicas, sociales, políticas,… un periodo de revolución y contrarrevolución permanente, en el cual tenemos que buscar las formas para que la clase trabajadora se prepare ante las inevitables luchas con una genuina dirección revolucionaria que posibilite la transformación socialista de la sociedad, al menor coste posible para la humanidad.