ESPAÑA: LA ECONOMIA REAL EN CAIDA LIBRE

*  En agosto, la Producción Industrial sufrió una Caída del 3,2%.

*  La Caída de la Producción se ‘modera’ solo gracias al sector Energía.

Salvador PEREZ

          La situación financiera de España es el reflejo objetivo de una situación objetiva en la economía real de verdadero desastre. Los datos publicados este viernes por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) así dejan constancia de ello. La producción industrial ha vuelto a caer fuertemente en el mes de agosto, con lo cual acumula ya un año completo de bajadas. Con respecto al mes de agosto de 2011, la Producción Industrial ha caído en picado en agosto de este año un 3,2%, cifras que no han sido aún peores por el periodo estacional del verano, en cuya época el turismo juega el papel de aportar ingresos extraordinarios.  En el mes de julio fuimos testigos de una caída de la producción industrial en España del 5,5%.

        Con un crecimiento del 4,3%, el sector de la energía es de los pocos que ha tenido cifras positivas, sobre todo gracias a la mejor situación de precios en el Refino del petróleo, el transporte y la distribución de la energía eléctrica, cuyas distribuidoras están pasando altos y crecientes recibos por el consumo a los ciudadanos.

         Los bienes Intermedios sufren en estos momentos una situación de caída en el vacío, con un decrecimiento del 4,8%. A estos hay que sumar los fuertes descensos que estamos viendo en sectores claves de la economía española, que reflejan el verdadero estado de la misma en una fuerte recesión que amenaza con convertirse en una autentica depresión económica. La fabricación de elementos de hormigón, cemento y yeso están copando los peores indicadores, en un pozo en el cual nadie ve fondo. Igualmente la Producción Química no se queda atrás en la tasa de caída de su producción.

        El sector construcción/Inmobiliario esta agónico y hablamos de un sector clave en la economía española, al cual no han buscado desde el gobierno alternativas, ni lograrán encontrarlas. Solo el sector que califican como ‘otro material y equipo eléctrico’ tiene en este contexto cifras positivas, pero ello es insuficiente para evitar que estemos viendo un verdadero colapso de la economía real española.

        Como decíamos, es este colapso de la economía real lo que se encuentra detrás de la fracturada situación financiera en la que vive el Estado español y que inexorablemente empuja hacia ‘un rescate’ europeo que se divisa alto más que complicado, por no llamar imposible. En agosto, con respecto al mes de julio, hemos visto una caída real de la producción industrial en España del 24,9%.

         En el conjunto del Estado español la industria aparece muy concentrada en algunas Comunidades Autónomas o regiones. El grueso central de la industria continua estando, históricamente es así, centrado en País Vasco, Cataluña y Madrid. Por ello tiene bastante valor indicativo el dato del Índice General de Producción Industrial (IPI) de la Comunidad de Madrid. En agosto pasado experimento un descenso del 9,4% y en lo que llevamos de año ha caído un sintomático 12,8%.

         En esta situación lo que el gobierno y los estrategas de la burguesía llaman ‘rescate’ para España será un rosario de medidas de recortes y más recortes de los niveles de vida de las masas españolas, con el único pretexto de la lucha contra la Deuda y el Déficit. En última instancia asistimos al macabro espectáculo de una transferencia masiva de recursos desde los sectores populares de la sociedad española hacia la pequeña minoría de los más ricos y pudientes de la misma.

        El gobierno se niega a reconocer algo que es evidente ya: la deuda pública jamás podrá ser pagada y toda ella consiste en una gran estafa que está realizando la clase capitalista a las clases trabajadoras, en España y en el conjunto de los países de la UE. La situación de la economía real en retroceso indica que desde un punto de vista objetivo, el de los datos y cifras reales, el sistema capitalista es incapaz de hacer avanzar a la sociedad y por tanto la hace retroceder hasta las puertas de la barbarie.

       Este es el momento histórico objetivo en el que la transformación socialista de la sociedad se convierte, más allá de una idea teórica, en una necesidad objetiva para la humanidad. Buscar el camino para ello es la tarea del presente y en ello la humanidad se juega su propia supervivencia.