OBAMA–CONGRESO: BUSCAN ACUERDO RECORTES SOCIALES

*  Fecha límite para RECORTAR PRESUPUESTO EEUU en 700 mil millones de dólares: 31 diciembre

¡¡ SOLO LUCHA TRABAJADORES EVITARA SALTO ATRÁS HISTORICO !!

Salvador PEREZ

             El recién elegido Presidente de los EEUU acaba de reunirse, todo indica que en lo que será en una búsqueda ‘negociada’ al problema del déficit presupuestario, con los llamados ‘líderes del Congreso de EEUU’. Ello es un claro síntoma de que la mayor parte de las preocupaciones de la clase política que representa a los distintos sectores de la burguesía en el Congreso norteamericano buscan con urgencia como evitar la entrada del país en el CAOS ECONOMICO, cosa que ocurriría de forma inmediata si antes del 32 de diciembre no logran ponerse de acuerdo en una cosa: como y donde recortar el Presupuesto de EEUU en más de 700.000 millones de dólares.

            Claramente, siguiendo la lógica capitalista, de los intereses puros y duros de la clase dominante, la Administración Obama, recién elegido para el nuevo mandato, está preparando todo el terreno no para cumplir sus ‘promesas de humo electoral’, sino para implantar un brutal y masivo recorte presupuestario, en la que todavía continua siendo la primera potencia económica mundial, lo cual tendrá claros y dramáticos efectos sociales para la inmensa mayoría de la población norteamericana. Los presupuestos sociales serán barridos al completo o dejados en mínimas expresiones de lo que fueron, comenzando por las ayudas a los parados, los recursos para la sanidad y educación pública,…

            Estados Unidos entra de lleno, de esta forma, en el nada selecto Club de los países que cabalgan a lomos de las políticas llamadas de austeridad, de RECORTES SOCIALES, LABORALES Y SALARIALES PERMANENTES, al que ya pertenecen la gran mayoría de los países europeos y van incorporándose cada vez, en el contexto de la crisis general del capitalismo mundial, más y más países.

           “Quiero dar la bienvenida a los líderes del Congreso y agradecerles su tiempo. Creo que todos estamos de acuerdo en que tenemos un asunto muy urgente que resolver. Tenemos que asegurarnos de que a la clase media no se le suben los impuestos y de que nuestra economía permanece fuerte. Estoy convencido de que podremos llegar a un acuerdo de ir creciendo y mantener el foco en asegurarnos de que las clases medias pueden salir adelante”. Estas han sido las palabras de Obama, el cual como un pequeño niño parece esperar la llegada de algún ‘regalo de Papa Noel’, y al menos públicamente, parece esperando no tener que prorrogar las exenciones fiscales que George W. Bush realizó para los ingresos superiores a los 250.000 dólares anuales, medidas que vencen a final de este año.

           En el fondo toda esta situación confirma 100 por cien las ideas centrales de nuestro artículo, publicado antes de las elecciones Presidenciales, el Partido Demócrata y el Partido Republicano, Obama y Romney, representaban dos caras de la misma moneda, la de la defensa de los intereses de la clase dominante, de la burguesía, que en los Estados Unidos, como en todos los demás rincones del planeta, están realizando unas políticas de saquear absolutamente todos los recursos de los Estados, para transferirlos a sus bolsillos, en un gran saqueo/robo organizado con la complicidad de los gobernantes y políticos burgueses, todos ellos puestos a su sueldo y corruptelas.

         Como prueba de todo ello, la ‘Casa Blanca’ califico el encuentro de “constructivo”(¡!), anunciando acto seguido que “tanto demócratas como republicanos manifiestan su intención de trabajar por el bien común para evitar el abismo fiscal, a pesar de reconocer diferencias”, En palabras claras, de personas libres de fariseísmos, con ello lo que quieren decir es que en el fondo están de acuerdo en la defensa de los intereses de la burguesía y en meter las tijeras a fondo en los capítulos sociales del Presupuesto Federal.

         John Boehner, Presidente republicano de la Cámara de Representantes, así como el representante de la minoría en el Senado, Mitch McConnell, ambos asistentes a la reunión con Obama, coincidieron en destacar que “son necesarios recortes significativos de los gastos”. En un alarde de rizar el rizo, McConnell. Añadió que “creo que todos los republicanos, sin excepción, piensan que estamos en el dilema que estamos no porque hayamos empleado poco los impuestos sino porque los hemos usado mucho”. Por su parte, una de las representantes del Partido Demócrata en el Congreso, asistente a la reunión, Nancy Pelosi, califico dicha reunión como “constructiva y que todos los americanos son conscientes de que debemos de llegar a un acuerdo. Deberíamos ponernos una fecha límite y deberíamos de enseñar alguna prueba de que avanzamos en lograr una solución porque si no logramos alcanzar un acuerdo perderemos la oportunidad de hacer algo importante por nuestra economía y subir la moral del país”. Sobran comentarios en estas hipócritas palabras.

            En agosto de 2011 se produjo el último gran enfrentamiento entre Demócratas y Republicanos entorno al déficit presupuestario, al que llegaron a un acuerdo en extremis para evitar la parálisis de la Administración, el bloqueo del funcionamiento del país. En aquel momento llegaron a un acuerdo, dejando de lado por ejemplo las propuestas demócratas de subida de impuestos a los más ricos. Todo decían lo dejaban aparcado a después de las elecciones presidenciales.

            En pocas semanas vemos claramente que todas las promesas electorales progresistas de Obama están siendo tiradas de forma rápida al cubo de la basura y en el Congreso y Senado ambos, demócratas y republicanos se pondrán de acuerdo en lo básico: la forma en cómo mantener e incrementar los llenos bolsillos de los grandes empresarios y banqueros.

             A partir de estos momentos la principal incógnita reside en cuál será la respuesta de la cada vez más combativa clase trabajadora norteamericana. Este periodo previo hemos visto importantes movimientos en su seno, el despertar a la lucha y ahora está por ver como una situación de profundos recortes y ataques a los presupuestos sociales, aquellos que afectan de lleno a los trabajadores y capas más desfavorecidas de la sociedad, podría ser el estimulo definitivo para un salto hacia la izquierda en la mayoría de la población y pueda expresarse en el desarrollo de fuertes tendencias de izquierdas en los sindicatos, lo cual puede dar un fuerte impulso en la lucha por la creación de un autentico Partido de clase de los trabajadores.

             Desde ya podemos afirmar que la primera potencia de la economía capitalista mundial entra en una fase de su desarrollo decisiva para el futuro. Europa está en ebullición, Latinoamérica embúllese desde hace años hacia la senda de la revolución socialista y los EEUU se incorporan en esa olla de presión a punto de estallar que es el capitalismo mundial hoy. La necesidad objetiva de la sociedad de sacudirse de la camisa de fuerzas que supone para su desarrollo la existencia de un sistema social basado en la explotación laboral y la desigualdad social acabara encontrando paso histórico. Comience por donde comience, el proceso está en marcha y los EEUU son una parte integrante más, muy importante por cierto, de una misma cadena que debemos de romper, la capitalista.